sábado, 14 de febrero de 2009

Una estrella, un deseo...


Hace poco he propuesto un pequeño juego a algunas personas. Para ellas aún es un misterio la finalidad del mismo, y quizás incluso les parezca un poco absurdo lo poco que de él conocen hasta ahora: simplemente formular un secreto y escribirlo en una tira de papel, un papel que poco a poco toma la forma de una pequeña estrella. Pero ¿qué ha de pasar con esa estrella? Es bien conocida la tradición de formular un deseo cuando tenemos la suerte de observar la belleza de una estrella fugaz en el firmamento. Por desgracia, no siempre podemos ver estrellas cuando nuestro corazón anhela formular ese deseo, o bien no sabemos que desear mientras contemplamos la estrella, y nuestra oportunidad se pasa, efímera como la estrella misma.

La pregunta más frecuente que me han hecho es ¿qué puedo desear? Lo entiendo. Todos tenemos muchos deseos que querríamos que se hicieran realidad, tanto para nosotros mismos como para los demás. ¿Desear algo para uno mismo? ¿O quizás ser menos egoista y desear algo que beneficie a los que te rodean? ¿O incluso llegar más allá y desear algo que sea bueno para todos en general?

No quería en absoluto condicionar el deseo de los demás. Nada más lejos de mi intención. ¡Es simplemente un juego! Sólo pretende permitir a algunas personas que puedan soñar con hacer realidad algo que deseen. Soñar y desear... Soñamos con aquello que deseamos, y deseamos aquello que soñamos.

He decidido ser participe de mi propio juego, apuntando en una de esas tiras un deseo, o quizás un sueño, o una mezcla de ambas. En cuanto termine esta entrada, anotaré mi deseo, compondré la estrella y la pondré junto a las demás estrellas.

Sólo espero que, una vez completado, nuestro corazón tenga un poquito más de esperanza en que aquello que deseamos se puede cumplir. Espero que pronto, os contaré cómo acaba este juego.


Para quien tenga la curiosidad de cómo hacer una pequeña estrella, dejo a continuación un video explictativo.